En orfebrería son muchos los materiales en los que podemos confiar para dar forma a nuestros proyectos. Los conocimientos y la técnica del orfebre es esencial para poder llevar a cabo todos los trabajos necesarios hasta moldear y adaptar el uso de este metal a nuestras necesidades.
Entre las diferentes opciones que existen en el mercado es la plata de Ley 925 una de las mejores opciones que podemos encontrar para ejecutar cualquier trabajo. Desde Kima Luna Orfebrería te contamos todo lo que tienes que saber sobre este material.
¿Qué es la plata de Ley 925?
Cuando hacemos referencia al concepto de Plata de Ley nos referimos a que una hoya cuenta con un mínimo grado de pureza, dependiendo de su terminación.
En España se considera plata de Ley aquella que cuenta con un mínimo de un 92,5% de plata. La plata de segunda ley es aquella que cuenta con una pureza que se ubica entre el 80 y el 92,4% de pureza.
¿Por qué se utiliza plata de Ley 925 en orfebrería?
En orfebrería, la plata de Ley 925 se utiliza porque la playa pura podría ser demasiada blanda para poder llevar a cabo sobre ella diferentes trabajos.
Al mínimo roce de nuestras joyas con cualquier otro material, éstas se marcaría. Empañando el trabajo llevado a cabo sobre ellas por parte de nuestro equipo de profesionales. Por esta razón, es necesario que se mezcle con otros materiales para poder imprimir un extra de dureza en nuestras creaciones. Como podemos comprobar, son muchos los motivos que favorecen el uso de la plata de Ley 925 como una de las mejores opciones por las que podemos decantarnos.
